Los grandes regalos que ofrece Lewis Hamilton son para su prometida, Nicole Scherzinger, ex miembro de las Pussycat Girls y que tiene bien encarada una carrera artística en solitario. Ahora mismo actúa en Londres en el musical Cats.
Para verla con más frecuencia, tras su primer título se compró un jet privado; llevaba mal que ella tuviera que estar en Los Ángeles por motivos profesionales y él basculando entre Londres y los Circuitos.
Ahora se ha hecho construir un estudio de grabación en casa “para que no tenga que ir constantemente a Los Ángeles”.
Pero reconoce que Nicole no lo puede utilizar mucho. No porque no esté en Londres sino porque Lewis lo monopoliza. Le gusta cantar y está preparando su segundo álbum. Y entre carrera y carrera dice que pasa más tiempo en el estudio que en el simulador. Amante del rap, ha evolucionado hacia el RnB. Dice que sus cantantes favoritos son Michael Jackson, Prince, Jay Z y Kodaline.
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