"Cuando Pablo me dijo que se iba a jugar a Bolivia, le dije que yo me iría con él a vivir hasta debajo de un puente", fueron las palabras de una persona sencilla, humilde, tranquila y totalmente alejada de la palestra que suele tener su marido, Pablo Escobar. Y es que Daniela Goyechea, el hombro que aguanta las derrotas del capitán atigrado, ha sido un pilar fundamental en la vida del ganador del Premio Mayor 2014-2015. Se conocieron en Jujuy (Argentina) cuando eran unos 'pibes' y desde entonces, jamás se separaron.
"No estamos acostumbrados a todo esto, somos algo más tranquilos y nos gusta estar en nuestra casa con nuestros hijos", contó algo emocionada Daniela al momento de dialogar con DIEZ en pleno paseo por la ciudad de Santa Cruz de la Sierra en una limusina, que por cierto, era la primera vez que se subía a un motorizado de ese tipo.
El pilar fundamental de la familia del 'Pájaro', como lo considera su propio esposo, solo vive para atender a Pablo y a sus hijos Florencia, Mateo, Benjamín y Agustín. No es aficionada a la moda, ni tampoco a los grandes eventos. Ella es feliz cuando salen todos al cine o cuando juegan en la sala de su casa.
Daniela conoce muy bien a Pablo, es más, ella sabe cómo recibirlo después de una derrota sufrida. Estronguista de corazón, asiste al estadio Hernando Siles con todos sus hijos para ver a su ídolo.
Cuando su media naranja recibió el galardón, ambos mostraron su amor a los presentes con un apasionado beso, que reflejó todo lo que habían pasado para llegar a este momento.
Daniela reveló algunos secretos del 'Pájaro'
La esposa de Escobar manifestó que su marido no es una persona que le interese la 'facha' ni el vestir cosas caras. "Es alguien sencillo, que ni bien llega a casa se saca los zapatos para ponerse las pantuflas", dijo la argentina, que también aseguró que las comidas favoritas de Pablo son las pastas. "Me gusta cocinarle, aunque él mucho no me ayude con los sartenes (risas)", bromea.
Además de los ravioles, pudimos conocer que la comida favorita del caudillo atigrado es el falso conejo. "Le agrada bastante, pero todavía no puedo cocinarlo", agregó Daniela, que recordó que son más de 15 años los que comparte con él.
Ambos son de ver películas y salir a pasear a lugares tranquilos. La argentina oriunda de Jujuy, llegó a Santa Cruz solo, porque sus hijos se quedaron en La Paz para ir a la escuela. Ella retornará este jueves por la mañana a la sede de Gobierno para tomar las riendas del hogar, mientras el diez de la Verde se prepara para defender al país en la Copa América de Chile.
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